Alguién que me rompa las medias con la boca . Que me haga el amor contra la pared. Que se pierda a mi lado para después rescatarme de laberintos sin sentido. Que saque la espada y me defienda de víboras, pirañas y dinosaurios. Alguién que le cosa sonrisas a mis días malos y los convierta en buenos. Que no se enfade si no le entiendo, ni me entiendo y le mareo. Que me saque la lengua cuando me ponga tonta y me haga enmudecer con solo una mirada. Que no de por hecho que siempre voy a estar ahí pero que tampoco lo dude. Que no me haga sufrir pero que no me venda amor eterno lleno de felicidad. Alguién que no pueda caminar conmigo por la calle sin cogerme de la mano. Que no me compre con regalos pero que tenga mil detalles de papel. Que no le guste verme llorar y que me haga reir hasta cuando no tengo ganas. Que de vez en cuando decida perseguirme por los bares y conocerme de nuevo. Que me mire, lo mire, y me tiemblen las piernas sin remedio con ese cosquilleo loco por la tripa. Alguién que esté loco por mí, y no se olvide de decírmelo los días de resaca. Alguién que me mate a besos cada mañana. Que si mira a otra, luego me guiñe un ojo, y se ría de mis celos de hojalata. Y sobre todo que no tenga que perderme para darse cuenta de que me ha encontrado.
Anónimo